Por: Thomas Hynes
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) propone designar varios productos químicos utilizados en la fabricación de plástico, incluido el cloruro de vinilo, como "sustancias de alta prioridad" bajo la Ley de Control de Sustancias Tóxicas (TSCA), el primer paso en el proceso de la EPA para prohibir productos químicos peligrosos, si se determina que representan un riesgo irrazonable para la salud humana y el medio ambiente después de una evaluación de riesgos integral.
Sin embargo, este es solo un paso para designar las sustancias químicas como de alta prioridad y emprender el proceso de gestión de riesgos. Por eso necesitamos a la EPA. priorizar sus recursos y atención para acelerar estos esfuerzos.
¿Podría tomarse un momento para instar a la EPA? a Evaluar urgentemente los riesgos que plantean estos productos químicos tóxicos?
En la actualidad, se utilizan o están presentes en materiales y productos plásticos más de 16,000 sustancias químicas, de las que se sabe que más de 4,200 son persistentes, bioacumulables, móviles y/o tóxicas, y 1,300 sustancias químicas preocupantes se utilizan en plásticos. A pesar del riesgo, solo el 6% de las 16,000 sustancias químicas están sujetas a regulación internacional.
Cada una de las cinco sustancias químicas que se propone incluir en la lista de sustancias de alta prioridad supone una amenaza para la salud humana y el medio ambiente, y todas están relacionadas con la producción de plástico. Los plásticos tienen un impacto negativo en cada etapa de su ciclo de vida, desde la producción hasta el uso y la eliminación. Se estima que, para 2019, se acumularán 140 millones de toneladas de plástico en los ecosistemas acuáticos. Como resultado de la contaminación plástica actual, se encuentran microplásticos en casi todos los sistemas orgánicos humanos. Más allá de los propios microplásticos que ingresan a nuestros cuerpos y ecosistemas, los estudios muestran que es común que más de 2,000 sustancias químicas se filtren al agua a partir de un solo producto plástico. Los plásticos amenazan la salud de todos los seres vivos del planeta y necesitamos urgentemente comprenderlos y regularlos mejor.
Es imperativo que la EPA priorice estos cinco productos químicos para su revisión y aborde el riesgo irrazonable que tienen sobre el medio ambiente y nuestra salud. En pocas palabras, priorizar estos cinco productos químicos es lo mínimo que la EPA debería hacer para abordar los efectos nocivos del plástico. Esta situación es insostenible si queremos proteger de manera significativa nuestra salud y nuestro medio ambiente, y Estados Unidos debe liderar la regulación de estos plásticos nocivos.
¡Únase a nosotros para instar a la EPA a proteger la salud pública y nuestro medio ambiente de estos químicos tóxicos!