Por: Waterkeeper Alliance
Hoy el Campaña Asegurar Nuestro Futuro publicó su séptimo cuadro de mando anual sobre seguros, combustibles fósiles y emergencia climática. El informe fue publicado conjuntamente por 22 organizaciones de defensa del clima, entre ellas Waterkeeper Alliance. El nuevo informe, Cincuenta años de fracaso climático, revela que muchas aseguradoras continúan financiando proyectos para aumentar la producción de petróleo y gas y al mismo tiempo se niegan a asegurar a los propietarios de viviendas en áreas climáticamente vulnerables que corren mayor riesgo. También confirma el papel clave que tienen las compañías de seguros para cambiar el rumbo contra el aumento de la producción de combustibles fósiles y el cambio climático galopante hacia una transición justa y un futuro sostenible.
Los últimos cinco años han sido un estudio de los extremos climáticos, incluida una frecuencia y gravedad crecientes de inundaciones, huracanes, incendios forestales, sequías y otros eventos relacionados con el clima. Según el informe, los pagos de seguros por catástrofes naturales se han disparado a un promedio de 110 mil millones de dólares al año desde 2017 (más del doble del promedio de los cinco años anteriores), mientras que los seguros de combustibles fósiles le reportaron a la industria alrededor de 21.25 mil millones de dólares en 2022. Al limitar el pago, las aseguradoras continúan alimentando la emergencia climática y algunas ahora se niegan a asegurar a los propietarios de viviendas en los mercados con mayor riesgo de desastres naturales.
En respuesta, Marc Yaggi, el CEO de Waterkeeper Alliance, emitió la siguiente declaración:
“En lugar de aceptar su papel clave para ayudar a la sociedad a asegurar un camino hacia un futuro habitable, muchas compañías de seguros capitalizan descaradamente la inacción climática apoyando financieramente proyectos de expansión de combustibles fósiles o negando cobertura de riesgo climático a personas en áreas vulnerables. Estos innegables actos de cruel negligencia agravan la miseria de quienes ya sufren la peor parte del cambio climático y subrayan la peligrosa priorización de las ganancias sobre las personas, las vías fluviales y el planeta. Ya pasó la época de las promesas vacías y los compromisos poco entusiastas. Estos gigantes de los seguros no sólo deben desinvertir en combustibles fósiles para ayudar a limitar el calentamiento global a 1.5°C, sino también proporcionar una cobertura equitativa del riesgo climático a quienes están en peligro”.